Henri De Braekeleer (1840-1888) provenía de una familia de artistas de Amberes. Su padre Ferdinand era un pintor de género muy querido y su tío Henri Leys fue el abanderado de la pintura histórica de Amberes. Desde los 14 años, Henri tomó clases de dibujo en la Academia de Amberes. A pesar de su origen familiar no hizo cuadros de género anecdóticos y divertidos, ni pintó grandes lienzos históricos. Es principalmente conocido por sus representaciones de interiores, con personajes, a veces vistos desde atrás. Tomando el ejemplo de los pintores flamencos del siglo XVII como Johannes Vermeer y Pieter de Hooch, observó la realidad muy de cerca. El juego de luz y color en sus pinturas y el hecho de que la representación y la combinación de formas sea tan importante como el tema, hacen que su obra sea moderna.
En una carta de van Gogh a su hermano Theo, escribe...
No es del viejo Braekeleer de quien quiero hablar, sino de un hijo suyo, creo, que tenía en la última exposición de Bruselas tres soberbios cuadros titulados
Amberes, La Escuela y Atlas.