Paul Flora nació en Glurns, Tirol, Austria, en 1922. Es uno de los principales artistas gráficos que empezaron a finales de la década de 1930. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Munich con el profesor, dibujante y pintor noruego Olaf Gulbransson.
Paul Klee, Lyonel Feininger y sobre todo Alfred Kubin fueron, entre otros, los que más influenciaron su obra. Con un estilo abstracto propio y con mucho humor, Flora nos ha narrado temas de la ciudad, de los militares y del teatro y ha introducido criaturas del Tirol, entre otras al cuervo. Su trabajo pronto adquirió repercusión y se distinguía por unos característicos dibujos realizados en tinta negra.
Flora siempre ha dicho que hacía dibujos, no caricaturas, aunque entre 1957 y 1971 ilustró la política del día en el Hamburg weekly Die Zeit, viñetas cargadas de ironía. Tambien tabajó para los periodicos británicos The Times y The Observer y para el diario alemán Die Zeit.
Como testigo de su época Flora siempre alude al pasado, como dijo Friedrich Dürrenmatt: "En su obra los mundos se han reducido y podemos sentir que nosotros también estamos bajando. El presente parece estar en las garras del pasado y no puede liberarse de ellas. Se convierte en el pasado mismo y es tragado por ella. (...) Flora retrocede hacia el futuro ".
Esta dialéctica entre el presente y el pasado y la melancolía son la característica de los dibujos de Flora-
Participó en la Bienal de Venecia en dos ocasiones. Murió en 2009 en Insbruck